jueves, 1 de septiembre de 2011

Por fin en New York

¡Por fin estamos en Nueva York! y lo más importante, ¡¡por fin tengo mi ordenador!! Hasta los webs estaba de la cagarruta del iPad para escribir. Cada 3 palabras me autocorregía 2 y bueno, no entro en detalles que solo de recordar ese suplicio me entran ganas de tirarlo por el retrete.

Como decía, hemos llegado por fin, tras un interminable viaje de 25 horas. Cuando subimos al Amtrak en Chicago y vimos los asientos confieso que pensé que iba a ser mucho más cómodo de lo que me pensaba: espacios muy amplios, se reclinaba bastante, apoyapiés, apoyapiernas...pero no. Que ingenuo, pensar que se me iba a dar bien parte del viaje. El asiento era un dolor en sí mismo. Ahora mismo me duelen hasta las mitocondrias, me duelen músculos y huesos que pensaba que ni existían.
Y lo peor es que creo que de los mil aires acondicionados que hemos soportado estos dias he cogido algo de frio y estoy empezando a resfriarme. Ya lo que me faltaba.

Pero bueno, al menos ya estamos en el apartamento de Nueva York y tras un repaso general, todo parece en su sitio, sin efectos del huracan, sin bichos...solo tenemos una duda, ¿se habrá ido la luz en nuestra ausencia con la consiguiente parada técnica de la nevera? Y si ha sido así, ¿se habrá estropeado lo que teníamos dentro?
Hemos optado por la opción más precavida, tomarnos las cosas y ver qué pasa. Elaine se ha tomado un batido y yo un par de yogures hace cosa de 1 hora y aun no estamos verdes ni nada.

Y una vez aquí, habiendo deshecho la maleta (que casi se deshace ella sola de la cantidad de cosas que tenía) ahora a preparar la visita de mi hermana, que viene en un par de días. No hay tregua en USA.

3 comentarios:

Paco Zafra dijo...

Bienvenidos de vuelta!

chicha dijo...

Ésto no ha sido un parto sin dolor, pero al fin estais en casa, me alegro, y... por favor, no hagais nada para no molestar a la madre naturaleza y que todo marche bien.
Es curioso, pero he estado pendiente de los comentarios como si de un familiar se tratara, voy a tener que tomarme unas vacaciones para no llevarme más sustos.
Bienvenidos

Rosa Zafra dijo...

¡Que suerte encontrarse todo en su sitio!
Supongo que os tirasteis como locos a la cama, despues de tantisimas horas sentados, estirar el cuerpo es lo mejor del mundo.