Todas las sorpresas en un dia

Hace 3 días llegaron de visita mis "cuñados" y puedo decir con gran alegría que los 4 aun seguimos vivos. Lo que al principio fue "esta vez nos lo queremos tomar con calma" se convirtió en un "plan de visitas ambicioso". Tan ambicioso que ni Alberto Contador podría seguir nuestro ritmo. ¡Que bien nos vendrían ahora los masajistas que acompañan a los equipos en el Tour de Francia!

Pero este plan tiene un lado muy positivo.
Por una parte estamos desarrollando una musculatura en el tren inferior que ni Abdujaparov en sus años de buen sprinter (véanse sus piernacas en la foto inferior).

Cycling Archives

Por otra parte, estamos viendo tantas cosas que van a tener que crear nuevos barrios para que tengamos cosas para ver.

Así, en esta vorágine de paseos hemos visto algunas cosas muy dignas de mención, tanto por lo bueno como por lo malo.

Empecemos por lo malo.

El museo Whitney

Una de las visitas que esperaba con más ganas era la del Museo Whitney de arte americano.
Este museo tiene el privilegio de contar en su fondo con más de 2500 cuadros de Hopper, uno de mis pintores favoritos.
Además, esperaba ver obras de pintores paisajistas americanos de la Escuela del Río Hudson, que no abundan en los museos de arte, precisamente.

Y en un golpe de "buena" suerte de los que solemos tener, resulta que el museo está en pleno traslado a la nueva sede y de la colección permanente solo tienen expuesto cerca de un 1%.
A ver, que de 2500 Hopper, ¡¡¡solo tenían expuesto uno!!!¡¡¡Uno!!! Y de la Escuela del Río Hudson, había entre 1 y 0, más bien tirando al 0.

Pero lo que más me indignó es que todas estas obras estaban acumuladas en una sola planta del museo, las otras 4 plantas las ocupaban exposiciones temporales que deberían haber sido realmente temporales y haberlas quitado al segundo de ponerlas.

Cabe destacar 2:

- Una performance (¡cómo me gustan!) llamada "Body drama". Body drama el que tenía yo agantándolo. Un tipo con una cámara enganchada a un extraño artilugio en la cabeza y enfocándose todo el rato, arrastrándose por el suelo, contorsionándose mientras acompañaba estos movimientos con gritos y gemidos de dolor. Simplemente I-N-D-E-S-C-R-I-P-T-I-B-L-E.

- La evolución del videojuego de los bolos. Esta tengo que confesar que, a pesar del descojone padre, hasta le vi la gracia. Consistía en una enorme sala con sus 5 enormes pantallas. A cada una se conectaba una videoconsola de épocas distintas y en ellas se proyectaban demos del juego de los bolos, desde el más cutre con píxeles hasta los más modernos en 3D.

El Intrepid

Todo el sinsabor y la decepción del Whitney cambió radicalmente con la visita de hoy al portaaviones Intrepid, en la que encima nos acompañó, esta vez sí, y de qué forma la buena suerte.

Para empezar, el museo en sí. Realmente no es un museo, la entrada incluye la visita a un portaaviones de la Segunda Guerra Mundial y un submarino de la Guerra Fría. ¡¡¡Vaya 2 visitazas!!! Con decir que el personal femenino que integraba el grupo ha salido encantado de la visita lo digo todo.
Diría sin exagerar que hemos hecho entre las 2 parejas cerca de 300 fotos y la visita completa nos ha llevado casi 4 horas y sin rastros de cansancio. Hay que pasarle filtros y en poco podreis verlas en el flickr de Elaine (veo que ya tiene algunas subidas).

Ver en qué condiciones se vive en esos monstruos de la tecnología militar es una experiencia espectacular.

Sin duda, la mejor y más entretenida visita que he tenido en estos casi 2 meses en Nueva York, mejor incluso que el partido de los Yankees que ya es decir.

Pero aquí no acaba la cosa, porque hemos tenido un golpe de fortuna bestial. Justo hoy iba al Intrepid toda la tripulación de la última misión espacial de la NASA, la tripulación del ISS Atlantis. Tengo que confesar con vergüenza que no conocía a ninguno de los astronautas, de hecho ni me sonaban de nada, pero vamos, me he hecho una fotaca con mi "cuñado" y el comandante del Atlantis que quedará para el recuerdo. Y hemos charlado con él 1 minutillo sobre las misiones que realizó en España, en Zaragoza y Morón. Finalmente nos hemos dado la mano, ¡le he dado la mano a un astronauta! Estoy por hacer una encuesta: ¿Qué encuentro ha sido más emocionante?¿éste o el de Harrison Ford?
Por cierto, la foto mia no la subo, que luego me reconoceis por la calle y me pedís autógrafos.

Indignación

Por último, y aunque en este blog trato de contar chorradas no puedo evitar comentar sobre lo que leo de España.
Me informo bastante principalmente gracias a mi buen amigo @hispaniavandala, que está muy implicado en el 15M y me fio mucho más de él que de lo que se pueda leer en los medios tradicionales.

Desde la distancia no puedo dejar de sentir vergüenza e indignación por la situación, jamás pensé que diría esto pero me siento abochornado de ser español. Siento auténtico asco y mucho me temo que toda esta situación acabará en violencia porque la gente ya no aguanta más.

Yo desde aquí mando ánimos a @hispaniavandala para que siga luchando, junto con otros muchos, por hacer de España un pais mucho mejor.